Los autos de las celebridades de los años 70 en el London Concours 2024
El Concurso de Londres ha levantado las cubiertas de la última exhibición en el evento imperdible de este verano: la clase ‘Carnaby Street’. Los terrenos de la Honorable Compañía de Artillería son el escenario histórico perfecto para esta celebración de la emoción y el optimismo de los “Swinging Sixties” de Gran Bretaña, con una exhibición de coches favoritos de las celebridades de la época, desde estrellas de rock y realeza hasta leyendas de la gran pantalla.
Del 4 al 6 de junio, el London Concours presentará una vez más una impresionante variedad de maquinaria rara en el corazón de la ciudad, durante tres días de indulgencia automotriz. La clase Carnaby Street es una celebración de los coches, en su mayoría propiedad o conducidos por las estrellas que ayudaron a dar forma a una década inolvidable: los años sesenta.
Pocos modelos resumen mejor el espíritu de la época que el buggy de dunas, especialmente el que lo inició todo: el Meyers Manx, basado en un chasis de Volkswagen Beetle. Y el de la colección Carnaby Street es el mismo que impulsó el actor Steve McQueen en la película The Thomas Crown Affair, con su coprotagonista Faye Dunaway; aquella en la que corrió por las dunas de arena y chapoteó en las olas. McQueen, que también era un entusiasta piloto de carreras, se involucró en el diseño del coche de la película, y lo equipó con un motor Chevrolet Corvair de seis cilindros planos que producía tres veces la potencia del VW, así como un parabrisas envolvente estilo lancha rápida, faros carenados en el capó y ruedas American Racing.
Guitarrista, cantante y compositor de los Yardbirds y más tarde de Cream, la música de Eric Clapton fue una nota clave en la banda sonora de los años sesenta. La exhibición contará con el Ferrari 365 GTC Berlinetta de 1969 que compró después de enamorarse del que tenía su amigo George Harrison de los Beatles. “Nunca antes había visto una en carne y hueso, y mi corazón se derritió”, dijo, comparando la experiencia con ver a “la mujer más hermosa de la tierra”. Diseñado por el as del diseño italiano Pininfarina, el coche está equipado con un motor V12 de 4,4 litros que produce 320 CV, lo que le permite alcanzar las 150 mph. pero, debidamente inspirado, pronto dominó el control del embrague en el Ferrari.
El DB5 de Aston Martin podría haber sido sinónimo del espía de pantalla James Bond, pero su sucesor, el DB6 coupé de dos puertas, fue la elección de las estrellas de la vida real de Gran Bretaña de los años sesenta. Paul McCartney, de los Beatles, y Mick Jagger, de los Rolling Stones, tuvieron uno, al igual que el modelo Twiggy, así como el actor y comediante Peter Sellers. Y el entonces príncipe Carlos, ahora Su Alteza Real el Rey Carlos, recibió el DB6 que todavía posee, como regalode cumpleaños número 21 de su madre, la difunta reina. Con una aerodinámica mejorada que incluía una cola ‘Kamm’ de estilo de carreras, y propulsado por un motor de seis cilindros y 4.0 litros con doble árbol de levas, el DB6 de 282 CV era un crucero de alta velocidad que podía transportar a cuatro personas con comodidad y estilo.
Si lo que buscaba era glamour y sofisticación, entonces el Mercedes 190 SL roadster, con su aspecto bajo y sus distintivas “cejas” sobre los pasos de rueda, se ajustaba a la perfección como un vestido de Givenchy o un traje de Saville Row. Recién salido de una extensa restauración, el prístino ejemplar de 1961 de la colección Carnaby Street fue conducido por la cantante galesa Dame Shirley Bassey durante la grabación en 1984 de su álbum de estudio I Am What I Am en Olympic Studios de Londres, y más tarde propiedad del miembro fundador del grupo Manhattan Transfer, Tim Hauser. Un raro modelo con volante a la derecha, y uno de los alrededor de 1000 construidos, tiene un techo rígido extraíble y está equipado con un motor de cuatro cilindros y 1.9 litros y una caja de cambios manual.
A la novelista y actriz Jackie Collins le encantaban sus coches, quizás ninguno más que su Ford Mustang fastback plateado. Rebelde como siempre, y vestida con un abrigo de visón naranja, vaqueros y gafas de sol, se dice que lo condujo para visitar a sus hijas en la escuela de la que ella misma fue expulsada. Este año, celebrando su 60aniversario desde su lanzamiento en 1964, el Mustang encarnó la ambición de Ford de atraer al mercado más joven con un automóvil de aspecto deportivo pero asequible con espacio para cuatro personas. Los compradores podían elegir entre un techo rígido de dos puertas, fastback o convertible, con opciones de motor que iban desde un seis cilindros en línea de 2.8 litros hasta un V8 de 4.7, con transmisión manual o automática. Pero cualquiera que sea la especificación, el Mustang capturó la imaginación de los jóvenes estadounidenses. Chuck Berry cantó al respecto, al igual que Wilson Pickett. No es de extrañar que se vendieran 22.000 Mustangs el primer día.
Sin embargo, los años sesenta no se trataban solo de ostentación y autos rápidos; el lujo y la tradición continuaron estando representados por marcas de prestigio como el Rolls-Royce Silver Cloud de 1965, que se verá como en casa en los cuidados jardines del HAC, aunque bien podría haber cruzado Carnaby Street o Kings Road en el día. Si bien no es tan impactante como el tratamiento psicodélico de John Lennon de su hermano Phantom V, sus faros cuádruples descarnados aún pueden haber sorprendido a los tradicionalistas. Pero en su interior todavía era todo cuero, elegancia y encanto del viejo mundo. Escondido detrás de un radiador inspirado en el templo del Panteón en Roma, susurraba un V8 de 6.2 litros aliado a una caja de cambios automática, que podía llevar el Silver Cloud a más de 100 mph, aunque a un costo de solo 13 millas por galón.
Andrew Evans, Director General del London Concours, dijo: “Nunca ha habido un mejor momento para recordar la década en la que Gran Bretaña capturó la imaginación del mundo con talento local que generó una nueva y vibrante era de música, moda, cine y automóviles, lo que llevó a la revista Time a apodar a Londres como la ‘Ciudad del Swing’. Los autos de los ricos y famosos que se exhiben en nuestra exhibición de Carnaby Street son un viaje en el tiempo a esos días felices de innovación, prosperidad y optimismo”.
Evans continuó: “Los invitados al HAC disfrutarán de una variedad sin precedentes de automóviles, junto con una gama decadente de opciones de comida y bebida, y una línea cuidadosamente seleccionada de marcas y boutiques de lujo. El London Concours 2024 será otra ocasión de total indulgencia automovilística”.
Fotos: Bonhams
