Tatiana Calderón acelera en Fórmula 2 de la mano de Karol G

La última semana de la piloto colombiana Tatiana Calderón fue intensa. Incluso, como ella misma lo reconoce, estuvo a punto de las lágrimas, porque el incumplimiento del pago del patrocinador Rokit al equipo AJ Foyt de la IndyCar la dejaba por fuera de las pistas y con los brazos cruzados, algo muy doloroso para esta bogotana que no desea quitar el pie del acelerador y sigue dando la pelea en un deporte machista.

Quizás, si se hubiera puesto a escuchar a la cantante colombiana Karol G y alguno de los apartes de la canción ‘El Barco’ se hubiera sentido identificada. “Andaba en soledad como un perro realengo, tratando de llenar ese vacío desde que no te tengo… Intentando no perder la cordura pero aquí me mantengo”.

Porque así ha sido durante casi toda la vida de esta joven bogotana, que contra viento y marea se ha mantenido en las grandes ligas del automovilismo mundial, incluso llegando a ser piloto de pruebas del equipo Alfa Romeo.
Vino a Colombia a cumplir un compromiso con la nueva Ministra del Deporte, mujer como ella, la medallista dorada María Isabel Urrutia, en la que habló de las tinieblas que aparecían en su futuro cercano.

Pero ella ha aprendido que la vida a veces juega con los seres humanos y que como ella mismo lo expresa, “uno nunca sabe que pueda pasar en este mundo y de vez en cuando se alinean los planetas”.

Y precisamente esa alineación, como dice la corredora, se dio esta semana y tuvo como ‘estrella’, que espera no sea fugaz, a la cantante Karol G, a la ‘Bichota’, como también es conocida la cantante de género urbano.

Unos cruces de palabras por chat y la interacción con la hermana de la misma (Jessica) obraron el milagro, y los anhelados recursos, tan escasos para los pilotos colombianos, y más para una mujer, llegaron precisamente de la cantante, quien de manera solidaria y apoyando la inclusión de género, decidió desprenderse de un buen dinero para apoyar a la piloto en sus sueños.

Gracias a ellos Tatiana, que hace parte de la Escudería Telmex- Claro y que considera este hecho como “surrealista”, vuelve a la Fórmula 2, categoría en la que participó en 2019, con el equipo BWT Arden. Pero esta vez lo hace con uno de mayores aspiraciones, el Charouz (probó con ellos en 2018), del que también hace parte el brasileño Enzo Fittipaldi, el nieto del legendario Émerson.

“Con lo que me está sucediendo hoy pienso que nada es imposible, pues hace algunos días estaba casi que llorando porque me tenía que quedar seis meses por fuera y eso era muy doloroso, pero hoy me encuentro en Spa-Francorchamps (Bélgica) pensando en que las cosas ahora pueden ser diferentes, porque ahora me siento más preparada y por eso creo que podría pensar en un top 10, algo que sería muy significativo”.

De hecho, su paso por la IndyCar, exigente para ella, teniendo en cuenta que los autos no cuentan con asistencias a la dirección, como si sucede en la F1, de alguna manera la preparó para el nuevo reto.

“Cuando llegué dijeron, ‘esta muchacha tiene más brazos de muchos de los pilotos que están acá’, algo que fue muy chistoso”.

La generosidad de Karol G y el apoyo de la Escudería Telmex-Claro le permitirán a la colombiana no solo transitar este fin de semana por una de las curvas más emblemáticas del automovilismo mundial, la Eau Rouge, sino que además estar presente en el resto de la temporada, en los trazados de Zandvoort (Holanda), Monza (Italia) y Yas Marina (Emiratos Árabes Unidos).

Tatiana está viviendo este momento milagroso de la mejor manera, y por eso quiere darle cabida al “poder del ahora”, por lo que no se ha puesto a pensar qué puede pasar con ella en la temporada 2023.

Eso sí, su gran sueño sigue siendo la Fórmula Uno, categoría que sigue manteniendo sus puertas cerradas a las mujeres, algo que se puede deducir de las declaraciones de el CEO de la máxima categoría del automovilismo mundial, o ‘Gran Carpa”, como lo llaman algunos, Stefano Domenicali: “No creo que haya pilotos mujeres en los próximos cinco años en la Fórmula Uno, estamos totalmente comprometidos a dar las máximas posibilidades a las mujeres, que deben hacerlo de la forma adecuada y sin precipitaciones”.

No obstante estás palabras, Tatiana considera que uno los mayores inconvenientes se da porque en las altas esferas de la dirigencia no hay personas de su género. “Me gustaría ver más mujeres en cargos altos en el automovilismo, pues eso haría que las cosas fueran diferentes para nosotras, que necesitamos más apoyo y oportunidades. Pero esta semana comprobé que nada es imposible y quienes se lo pierden son ellos”…

 

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